Durante una escala en Buenos Aires camino a Chile, María, de 31 años, reconoce una canción infantil. María no habla una obra de español, pero sin entender lo que canta, recuerda la letra en español. Perturbada y desviada, decide interrumpir su viaje y deambular por la ciudad desconocida. Por teléfono a Alemania, le cuenta a su padre, Anton, sobre su experiencia y la fascinación peculiar que la ciudad desconocida ha tenido por ella. Dos días después, Anton aparece repentinamente en el hotel de María con algo que confesar: María pasó los primeros tres años de su vida en Buenos Aires durante la dictadura militar a fines de la década de 1970. Las personas que siempre pensó que eran sus padres la adoptaron y la trajeron a Alemania. Padre e hija comienzan un viaje en busca de los padres biológicos de María. Anton hace todo lo posible para no perder a su hija.