A Camille no le gusta el hombre que vio su madre. Ella todavía sueña con su padre que vive en Nueva York. Un día, vio a su madre discutiendo con una mujer merodeando por su casa durante algún tiempo. Ella reconoce en esta mujer a su padre que había cambiado de sexo. Rechazando su transformación, intentará convencerlo de que se convierta en su padre, un hombre de nuevo.