Victoria y Michael Peyton se mudan de la gran ciudad a los suburbios después de la pérdida del trabajo de Victoria y un posible colapso mental. Cuando empieza a sospechar que su vecino de al lado tiene a una joven encerrada en su sótano, su marido piensa que puede estar perdiendo el contacto con la realidad. Pero la maldad del vecino comienza a volverse demasiado real.