París, 1994, noche: mientras los Leningrad Cowboys cantan "Those were the days", un hombre solitario que lleva un burro es rechazado en la puerta de un restaurante. Él y la bestia caminan hasta La Maison du Vin donde, a pesar de un letrero que dice "no se admiten burros" en la pared, entran y él procede a alimentar al burro con provisiones de su mochila.
Su cuidado y alimentación del burro impresionan a la mujer que canta con la banda de la casa. Ella y el visitante conectan, pero si se escapan, ¿quién cuidará del burro? Los zapatos del visitante y el cabello de casi todos, excepto el del burro, apuntan hacia adelante.