Un hombre es encontrado muerto dentro de un apartamento con un extraño ruido, "¡Ayuda! ¡Ayuda!", junto al cuerpo. El detective Frank Lam llega a la escena con su oficial al mando Yip Sir para encontrar al único sobreviviente y testigo ocular.
Yip Sir está convencido de que el fallecido, Henry Tsui, fue asesinado por su cómplice, Sunny Wong, cuando tuvieron una pelea sobre cómo repartir el botín de un robo armado hace un mes. Cuando Frank confronta a Sunny, este niega todas las acusaciones y señala a Yip Sir como el asesino.
La única esperanza de Frank para resolver el caso radica en el testigo no tan humano dejado en la escena del crimen.