Gradiva es una novela escrita por el autor alemán Wilhelm Jensen en 1903. La historia sigue a un arqueólogo llamado Norbert Hanold, quien se obsesiona con una escultura de una mujer romana llamada Gradiva.
La obsesión de Hanold lo lleva a tener sueños vívidos en los que Gradiva cobra vida y lo lleva a través de un viaje en el tiempo a la antigua Pompeya. A medida que avanza la historia, Hanold comienza a cuestionar su cordura y la realidad de sus experiencias.
La novela explora temas como la obsesión, la fantasía y la realidad, y plantea preguntas sobre la naturaleza de la percepción y la imaginación. Gradiva es considerada una obra de culto en la literatura psicoanalítica y ha sido objeto de numerosos análisis críticos a lo largo de los años.