Cuando la relación del jefe de policía Jesse Stone con su ex esposa empeora, teme que recaiga en el alcoholismo. Para dejar de pensar en sus problemas, Jesse comienza a trabajar en el asesinato sin resolver de un cajero de banco baleado durante un robo. Mientras tanto, la investigación de Stone sobre una presunta violación lo pone en conflicto con el ayuntamiento, que espera preservar la reputación de Paradise como un balneario ideal.