Después de despertarse en un apartamento donde solo la noche antes de una fiesta estaba en su apogeo, Sam se ve obligado a enfrentarse a la realidad: ahora está solo y los muertos vivientes han invadido las calles de París. Petrificado por el miedo, Sam tendrá que atrincherarse dentro del edificio y organizar su supervivencia. ¿Pero es realmente el único superviviente?