Cuando Sam Taylor (Rodney Scott) conoce a Lisa Wayne (Joan Severance), experimenta la máxima fantasía de todo chico de 18 años: sexo sin ataduras con una mujer mayor hermosa y desinhibida. Sin embargo, a medida que avanza el verano entre la escuela secundaria y la universidad, Sam descubre que cuando se trata de sexo siempre hay condiciones. Sam, sin saberlo, se convierte en un peón en el retorcido juego emocional de Lisa.