El ejecutivo de publicidad Trey Mitchell trabaja habitualmente hasta tarde y cena con su ex. Eso hace que su esposa Leeza sospeche tanto que contrata a un policía policial, Ethan Woods. Pero tiene un pasado oscuro y tiene la intención de eliminar a Trey por cualquier medio y hacer suyo a Leeza. Trucos sucios e incluso asesinar a un vecino observador fabrican pruebas suficientes para romper a la pareja, pero vuelven a estar juntos como el querido hijo Dylan se merece. Ethan ahora contrata a un drogadicto para apuñalar a Trey hasta la muerte, pero eso fracasa. Su equipo de vigilancia es descubierto, pero escapa y hace su último movimiento.