Bénédicte Meursault, una mujer bombero, acaba de ser trasladada a un pequeño cuerpo de bomberos en el sur de Francia. La recibe Philippe, de 45 años, el sabio capitán de la brigada. Poco después de ser presentada a los hombres, la joven entra en acción. Desafortunadamente, mientras rescata a las víctimas de un terrible accidente automovilístico, no encuentra a uno de los heridos que fue expulsado a treinta metros de distancia. Ahora el hombre está en el hospital en coma y puede morir a causa de ella. Totalmente molesta, Bénédicte decide dimitir, pero Philippe la disuade de hacerlo.