¿Hay un lugar en el mundo para Yu Ming? Es empleado de una tienda de conveniencia en China, aburrido de su vida. En una biblioteca, hace girar un globo terráqueo y lo detiene con su dedo, que resulta estar tocando Irlanda. Lee sobre el país y se enseña irlandés por sí mismo, vuela a Dublín y, para su disgusto, descubre que nadie le comprende. Asume que su irlandés tiene la culpa, es decir, hasta que entra a un bar en busca de trabajo.