Cuando un joven sin hogar es asesinado en los terrenos de un monasterio budista en Bangkok, la policía hace poco por investigar, dejando al padre Ananda, un ex detective de homicidios, para intentar resolver el crimen. Con la ayuda de un niño huérfano llamado Jak, Ananda recorre los canales de la ciudad para desentrañar las pistas y atrapar al asesino.