Gaston y Leo son miembros de la policía motorizada. Ambos no son muy inteligentes y, tras otro error, se ven obligados a realizar patrullas a pie. Mientras tanto, un misterioso villano secuestra a mujeres. Gaston y Leo intentan detener al criminal por sí mismos para demostrarle al comisionado que pueden hacer más que crear pánico. Pero las esposas del dúo no se lo ponen fácil.