Johan tiene tres hijos con diferentes mujeres. Dos hijas adultas: Sophie y Virginie, y un hijo pequeño en Amsterdam. Loïc le dio a Johan diamantes de origen criminal. Su esposo Simon pensó que eran suyos y la asesinó. Luego emprendió su búsqueda de los diamantes y de matar a Johan. La policía pensó que Johan había asesinado a Loïc y llamó a sus hijas, que no se conocían. Luego, Sophie recibe una nota para tomar un tren a Amsterdam. Un niño le da a Virginie el mensaje oral "El tesoro está en la trucha". De inmediato comprende que esta trucha debe estar en el congelador de su madre, sin que ella lo sepa. Ambas chicas toman el tren. Simon los contacta como un compañero de viaje útil. Las chicas pronto detectan su objetivo de asesinarlas. En Bruselas escapan del tren. Virginie roba un coche pero no es tan buena conduciendo como robando (lo demostrará de nuevo). Pero llegan a Ámsterdam, donde una serie tumultuosa de eventos implican amenazas y ...