Max es un perro Jack Russell modificado genéticamente con fines delictivos, por lo que puede hablar. Huyendo de los delincuentes con los que trabaja es herido y salvado por el detective que intenta ser Alberto, que es despedido y busca un hogar. Terminan en la casa de Marta -la cuñada de Alberto- que vive con sus dos hijos. Gracias a todos ellos Alberto finalmente logra ser detective y establece con Max su agencia de detectives: Sabuesos.