En los primeros días de la Segunda Guerra Mundial, los nazis ocupan Varsovia. En una demostración de coraje y compromiso extraordinarios, el guardián del zoológico Jan Zabinski decide esconder en su casa a los residentes más amenazados de la ciudad. Antes del final de la guerra, el zoológico de Varsovia se convertirá en un refugio seguro para 300 hombres, mujeres y niños judíos.