El sheriff Tom Dobbs ve con malos ojos la fascinación de su brillante y nerd hijo Eric por la meteorología, a diferencia de su profesor de física. Eric tiene una teoría original para predecir una tormenta excepcionalmente devastadora, acerca de que el director de la oficina regional de meteorología de St. Louis se niega a tomarlos en serio, al igual que Tom. Después de que los hechos prueban que Eric tiene razón, la ciudad sufre un daño apocalíptico. Eric le dice a papá que ve una salida.