Albi, Franz y Tayfun se relajan en sus días de pueblo pequeño, felices de trabajar en el garaje, recoger chicas y andar en bicicleta. Un poco de libertad. Cuando el nuevo jefe los echa, tienen que recurrir a nuevos medios para pagar las bebidas, los cigarrillos y las amadas motocicletas: apuestas, carreras, choques, robo de autos. Pero cuanto más difíciles se ponen las cosas, más se mantienen unidos.