A finales de la década de 1950, Hyacinth trabaja como sirvienta para Dulcie y Claude Cooper-Smith, tratando de hacer pasar el alcoholismo de papá como los efectos de su herida de guerra, no es que engañe a sus hermanas, la sufrida cerradura Daisy, la promiscua Rose y Violet, que sabe interpretar a un hombre rico. Cuando Dulcie se entera de la infidelidad de su esposo y se toma un amante, Hyacinth se acerca a ella, pero muestra total discreción, afirmando que quiere un caballero como esposo. El novio William podría cumplir los requisitos, pero papá, como era de esperar, arruina la relación.