Al visitar a su amigo inmortal Cheiron, quien fue herido accidentalmente por Hércules durante una batalla, todo el fuego en el pueblo se apaga. Hércules va al único lugar que aún tiene fuego, el templo de Hera, y descubre que la malvada diosa está detrás del evento. Se encuentra con la líder del pueblo Deianeira, y juntos se dirigen a ver al dios del fuego Prometeo y lo encuentran congelado. Aprenden que Hera ha robado su antorcha de fuego y si este fuego se apaga, la humanidad estará condenada a morir.
Zeus revela a Hércules dónde está Hera, pero le aconseja que no vaya ya que podría morir. Sin embargo, Hércules continúa su viaje con Deianeira, y se encuentra con la chica Phaedra en el bosque, quien les da consejos equivocados, retrasando a Hércules en su enfrentamiento con Hera.