Henry Glassie se ha ganado la vida estudiando a los artistas populares y las maravillas que crean. Durante los últimos 50 años, el renombrado académico estadounidense ha viajado a los cinco continentes, realizando trabajo de campo con una minuciosidad obsesiva. Cada proyecto que emprende Henry Glassie requiere al menos una década. Rebosante de conocimientos sobre el impulso artístico, y sobre cómo cada cultura manifiesta su propio estándar de belleza y significado, este retrato poético de Henry Glassie funciona como un diario de viaje y nos lleva a lugares en los que Henry Glassie se ha incrustado. En Bahía, Brasil, conocemos a Evidal Rosas, encargado de reconstruir estatuas sagradas de las que no quedan registros, y Rosalvo Santana, que esculpe meticulosamente en arcilla a un santo magistral flanqueado por querubines. Capturado con fascinante intimidad por el director Pat Collins y el director de fotografía Colm Hogan, el proceso de estos artistas es sobrecogedor. Henry Glassie: El trabajo de campo también nos permite presenciar el levantamiento de un enorme horno en Piedmont, Carolina del Norte y ...