Alfred (también conocido como Alferd) Packer se promocionó a sí mismo como guía para un grupo de pioneros que esperaban encontrar plata en las montañas de Colorado. Después de vagar por el desierto con sus clientes, insistiendo en que sabía a dónde se dirigía, pronto se hizo evidente que el grupo estaba irremediablemente perdido y tendría que afrontar el duro invierno por su cuenta. A medida que se acabaron los suministros de alimentos y los hombres empezaron a morir de hambre, Packer tomó la fatídica decisión de salvarse por cualquier medio posible y utilizar a sus desafortunados clientes como alimento.