Angie no tiene suerte al hacer una audición para películas. Piensa en volver a casa, pero su compañera de cuarto Claudia la convence de que intente trabajar en el "club de caballeros" con ella para ganar más experiencia de vida. Angie espera poder convertir la experiencia en una actuación más efectiva, pero tiene dificultades para superar sus inhibiciones. Conoce a un director de cine agotado en el club que la ayuda con su dilema.