Biopic sobre Niccolo Paganini. Recibe formación de su padre en la primera infancia. Los mejores profesores de Parma son incapaces de darle más, por lo que Paganini recurre a unas 15 horas diarias de riguroso autoaprendizaje. Realiza sensacionales giras de conciertos en Viena, París, Londres y muchas otras ciudades de Europa. Siempre está jugando de memoria, vestido de negro, y su apariencia en el escenario respalda los rumores de sus habilidades sobrenaturales. Es un hombre rico, pero el juego y el gasto imprudente le obligan a empeñar su violín. Un rico oyente le regala un violín Guarneri para que se lo quede. Posteriormente entrega este violín a la ciudad de Génova. Leonide Kogan toca el violín de Paganini en esta película.