El pueblo de Papayal está ubicado en la selva amazónica. Está gobernado por la violencia, la codicia y el vicio. Ha crecido alrededor de minas donde se extrae oro y donde el mercurio ha destruido severamente el medio ambiente. Aparte del bar y el burdel local, los colonos no tienen nada que hacer más que trabajar en las minas. De vez en cuando llega un hombre llamado Fellini y proyecta películas. Un día la madre de la adolescente Isabel y su amante le roban el oro al minero El Gallego y huyen de Papayal. La niña se ve obligada a pagar su deuda, trabajando en el burdel. Isabel intenta escapar, pero la policía la atrapa y conoce a Cae, un joven que es comprado por un comerciante para trabajar en las minas de oro. De vuelta en Papayal, Isabel se enamora de Cae, quien le dice que tanto su madre como su amante han sido asesinados.