Tom trabaja en el turno de noche en el departamento de inmunología de un hospital. Encuentra una radio para hacer compañía, pero el lector de noticias las 24 horas del día invade lentamente sus pensamientos. La noticia se centra en el virus de la gripe aviar y su transmisibilidad a los humanos. Tom decide aislarse en el campo, donde encuentra un arma y se dedica a cazar cuervos, buitres y otras aves que anuncian el regreso de la primavera. Pero ya es demasiado tarde: el virus ha comenzado a hacer su trabajo mortal. La película da una mirada crítica a cómo los medios de comunicación transmiten el miedo, que intencionalmente amplifican los eventos potencialmente más alarmantes, alimentando la ansiedad dentro de sus audiencias.