Londres 1899 - Devastado por la pérdida de su amada esposa, el capitán Henry Joyce se une al altamente secreto Suicide Club, un lugar donde uno puede ser llevado a la eternidad en silencio y sin escándalos. Esta sociedad altamente secreta atiende a un grupo decadente de aristócratas de élite. Está dirigido por el Sr. Bourne, quien proporciona a sus clientes los últimos vicios que deseen. La membresía en el Suicide Club es un contrato irrevocable con una sola cláusula de salida: muerte. Sin embargo, el Capitán Joyce comienza a lamentar su decisión después de conocer a Sarah Wolverton, la única mujer miembro del Club.