La película comienza detallando cómo y por qué el Ejército de los Estados Unidos comenzó a utilizar uranio empobrecido en sus municiones, en el contexto de las pruebas de armas nucleares en el Pacífico y la carrera armamentista nuclear durante la Guerra Fría. Luego se discuten los efectos del uso de uranio empobrecido por parte de Estados Unidos durante la Guerra del Golfo en Iraq y Kuwait, presentándolo como una prueba antes de su uso en Bosnia y Herzegovina en 1995 y en la República Federal de Yugoslavia en 1999.
El documental luego presenta los bombardeos de la OTAN a fábricas químicas y refinerías de petróleo yugoslavas como crímenes contra el medio ambiente. A través de entrevistas con expertos militares y médicos serbios e italianos, la película sugiere que la OTAN convirtió intencionalmente los Balcanes en un laboratorio experimental en el que los soldados de KFOR y la población civil fueron utilizados como cobayos humanos.
El documental continúa evaluando la amenaza potencial proveniente de organismos genéticamente modificados, pequeñas centrales hidroeléctricas, contaminación del aire y cambio climático, abogando por que el sistema neoliberal es el culpable de la destrucción continua del medio ambiente.
La película ofrece una breve historia de cómo ese sistema fue impuesto en Serbia, a través de entrevistas con representantes del gobierno actual y de la oposición, así como expertos económicos. Detallando el ascenso del presidente serbio Aleksandar Vucic y varios asuntos de su gobierno, la película sugiere que el cambio ya no es una cuestión de elección, sino de supervivencia.
El documental presenta ejemplos positivos de países que pudieron cambiar sus sistemas políticos y económicos, pero también muestra historias de rebelión en Serbia misma, en las que pequeños grupos de individuos bien organizados lograron vencer al sistema, que el autor considera "podrido".