Bert Rigby vive en la pequeña ciudad inglesa de Langmore, donde la mayoría de la gente depende del trabajo en la mina local, que le está yendo mal. Mientras sus compañeros vuelven a estar en huelga, decide probar suerte en el mundo del espectáculo. Su primera aparición en el escenario sale mal, pero el público lo ama. Rigby comienza una nueva carrera como comediante en un espectáculo amateur itinerante por 50 dólares la noche. Un día recibe una oferta de un director de publicidad de Hollywood y vuela a los Estados Unidos, esperando una gran carrera y dejando atrás a su joven esposa embarazada.