Argel, década de 1920. El rabino Sfar tiene más de un problema. Su hermosa hija Zlabya se está convirtiendo en una adolescente y, sobre todo, su gato asesino de loros acaba de empezar a hablar. La entrega de una caja desde Rusia complica aún más las cosas cuando se descubre en su interior a un pintor, más muerto que vivo. Está en la búsqueda de una tribu oculta y su ciudad mítica en África. Convencido de que la ciudad existe, emprende una aventura increíble, llevándose al rabino, su gato, un viejo y sabio jeque árabe y un excéntrico millonario ruso.