Es el 69 d.C. en Roma y el sabio estafador Marcus Didius Falco se ve envuelto en la muerte del hijo de un hombre cercano al nuevo emperador, Vespasiano. Contratado por la hermana de la víctima para descubrir la verdad, Falco y su esclavo recién adquirido, el gladiador Justus, descubren complots relacionados con un culto que llega hasta la casa imperial.