En febrero de 1964, tres meses después del asesinato del presidente Kennedy. El mayor Yuri Nosenko de la KGB hace contacto secreto con un joven oficial de la CIA, Steve Daley. Tiene información sorprendente sobre el vínculo de la KGB con el asesino de Kennedy, Lee Harvey Oswald, y quiere que Daley lo ayude a desertar. Así comienza una de las historias más extrañas de la Guerra Fría, cuando la deserción de Nosenko lleva a la CIA a la caza de un topo soviético que sospechan que ha penetrado hasta el corazón de su organización.